Atenta al contexto de restricciones cambiarias -que abre oportunidades de compra de activos de real estate, como ya sucedió años atrás-, Cushman & Wakefield, empresa global de servicios inmobiliarios corporativos, anunció el lanzamiento de un nuevo servicio: un plan desarrollado especialmente para aquellas compañías que necesitan resguardar el valor de sus pesos en un contexto de restricción cambiaria.
“Brick Value es el nombre formal del plan que armamos luego de haber asesorado e implementado esta solución con importantes empresas. Se orienta a la compra de inmuebles corporativos, como una alternativa de inversión segura, discreta y confiable para aquellas empresas que, ante la imposibilidad de girar utilidades al exterior y comprar moneda extranjera, buscan diversificar su cartera, generar una renta o utilizar los inmuebles para uso propio”, indicó José Viñas, director de Brokerage de la firma.
El nuevo servicio de Cushman & Wakefield ofrecerá planes ad hoc para inversión inmobiliaria y una cartera de oportunidades especialmente dirigidas para ese objetivo, señaló la empresa.