Las corporaciones incorporarán mayor cantidad de espacios pero más pequeños y modificarán las tecnologías actuales. Los costos para los segmentos básicos y medios van desde los USD732,40 a los USD1.491,50 el metro cuadrado.

La necesidad de establecer medidas preventivas para garantizar un espacio de trabajo seguro, demandará una reconfiguración de las locaciones para el momento en que las empresas decidan retomar las actividades presenciales en las oficinas.

En ese contexto, compañías de diferentes rubros y tamaños ya están elaborando un presupuesto para encarar la reconversión.

CBRE, compañía global especializada en real estate corporativo, elaboró una guía de costos que contempla los precios de acondicionamiento de los futuros espacios corporativos. Los costos cubiertos incluyen honorarios, construcción interiorista, instalaciones, mudanzas, mobiliario y diseños.

En Buenos Aires, se observa una ligera caída en los precios para las opciones de diseño y equipamiento básico y medio: los costos van desde USD732,40 a los USD1.491,50 el metro cuadrado. En el caso de las oficinas premium, los valores han ido creciendo en los últimos años ya que estos clientes se inclinan por las últimas tendencias y mobiliario de alta gama. El promedio aquí alcanza los USD2.592 por metro cuadrado.

En el contexto actual de aislamiento, el efecto Covid-19 sobre los precios aún no es mensurable, pero, en cuanto finalice este período, se espera un severo aumento con ajuste por inflación, indica en CBRE.

“El mayor impacto de esta situación sobre los proyectos es, obviamente, el retraso de más de casi 150 días. En el mediano plazo se anticipa que la reactivación de la construcción será más lenta, hasta que los proyectos puedan recuperar toda su capacidad operacional, con procesos de ingreso más exhaustivos para las personas y un menor número de trabajadores en el lugar al mismo tiempo. Sin embargo, no se han observado efectos de la pandemia sobre los procesos de diseño gracias a que las empresas han adoptado rápidamente la metodología remota”, asegura la compañía.

Con respecto a los cambios que se darán en el uso de la tecnología, destacan que en el corto plazo los teléfonos clásicos y los controles de acceso a través de huellas dactilares serán sustituidos por otros métodos que impliquen un menor contacto. “Por otro lado, y a mediano plazo, las empresas están evaluando implementar soluciones de reserva de estaciones de trabajo y salas remotas”, afirma Ana González Ferrero, directora de Project Management CBRE.

A raíz de este contexto, se ha visto una tendencia entre las empresas a reducir sus instalaciones existentes, pasando a un modelo de trabajo híbrido de la oficina en casa y la oficina empresarial, que permitiría una reducción de metros cuadrados. “Sumado a esto, es posible que si se produce una devaluación del peso argentino (teniendo en cuenta que los costos de construcción se cotizan en pesos y los presupuestos de proyectos en dólares), se genere una oportunidad para hacer mejoras de capital que las empresas puedan querer aprovechar en el corto plazo”, afirma Nicolás Ferrero, Cost Expert CBRE.

Adecuación

En ese contexto, la empresa Cushman & Wakefield, elaboró el programa 2 Metros en la Oficina (2MO), para adaptar de la manera más práctica y económica posible el interior de los lugares de trabajo a los nuevos requerimientos, con medidas ya probadas en Estados Unidos, Australia y diversos países europeos.

“El factor principal de esta adecuación es preservar la distancia social, señalada por los expertos de manera unánime como primordial a la hora de evitar la circulación del virus. La propuesta es intervenir en tres áreas: puestos de trabajo, layout (configuración general de la planta) y reglas claras. Creemos que la clave está en cambiar los patrones de conducta a través de un diseño inteligente; realizar cambios incrementales en el espacio de trabajo, y ofrecer una solución sustentable y customizable” indicó Valeria Hecht, Gerente del área de Project Management de la compañía.

Fuente: BAE Negocios